En 2006, la Convención Constituyente (CC) reformó la Carta Magna que había modificado por última vez Fuerza Republicana en 1990. Por impulso del alperovichismo, se sancionó la ley 7.469/04, que fijó los límites y características de la reforma. En cuanto a los costos, se estableció que el cargo de los convencionales sería ad honórem. Se aclaró sin embargo que sí se habilitaban desembolsos para cubrir gastos de funcionamiento de la CC, como contratar asesores y alquilar oficinas.
La CC se financió, según el Tribunal de Cuentas (TC) a través del Ministerio de Gobierno y Justicia (MGyJ). En 2006, a través de dos decretos, se destinó un total de $ 1,8 millón. La CC aprobó la rendición de esas erogaciones en la última sesión, en “paquete” con otras resoluciones, y sin la presencia de los convencionales opositores. El encargado del manejo de los recursos era el presidente de la CC, Juan Manzur.
En el decreto N° 1.039 (MGyJ) de abril de 2007, el gobernador, José Alperovich, avaló aquel trámite administrativo. El TC, al realizar los informes de las Cuentas de Inversión 2006 y 2007, no realizó observaciones al respecto. Los gastos, finalmente, fueron aprobados por la Legislatura, por el paso del tiempo, en 2009 y 2010.
Entre los recibos que publicó LA GACETA como gastos de la CC aparecen cinco firmados por Manzur, por un total de $ 735.000. El entonces jefe del bloque oficialista, Rodolfo Ocaranza, puso su rúbrica en siete recibos por $ 1,2 millón. Si se suman los documentos publicados por este diario -firmados por otros convencionales- la sumatoria total llega a $ 2,2 millones.